Les voy a relatar mis queridos compatriotas, una bella historia de un grupo de amigos que un buen día decidieron dejar de ser virgenes campamenteristicamente (uhhh que droga que tengo jajaja) y se fueron a acampar todos juntitos a una isla perdida en la mitad de la nada, donde cuenta la leyenda, habitó el General!!Érase una vez, en una tierra lejana llamada “Barrio de Abasto” tambien conocida como “la casa de Ema” en donde 4 (cuatro) [si, como todas mis notas] individuos altamente equipados para el camping se encontraron un viernes santo a las 6.00 de la mañana listos y preparados para zarpar con rumbo desconocido…
Dos grandes taxis nos aguardaban en la puerta de dicha casona. Con gran esfuerzo los bolsos fueron cargados. 
El sol apenas se asomaba, cuando se escuchó el rugir de los motores. La aventura comenzaba….Retiro, primer destino conocido. Una estación vieja, tosca y muy fría nos dio la bienvenida. Luego de una eterna espera, plagada de risas, chistes y jodas el tren arribó a la estación. La buena onda y el buen ambiente ya se empezaban a sentir.Rivadavia, Vicente López, Olivos… las estaciones pasaban y los bostezos se contagiaban, el sueño empezaba a sentirse. En el silencio de la mañana una voz grave y atemorizada versó: “somos unos pelotudos, nos olvidamos la guitarra”… “alguien agarró las ollas?” “che, tambien nos dejamos la ouija” SOMOS UNOS IMBÉCILES” El corazón se nos detuvo.
Luego de un breve llamado al Dr. Villaverde oriundo de “Los Polvorines (la localidad más violenta del conurbano bonaerense)”, solucionamos el tema de las ollas y de la viola… y continuamos viaje hacia la estación de Tigre, en donde (en teoría) nos aguardaría el Masi de la gente.Llegamos a tigre, sin encontrarnos con Maxi. Partimos, caminando y con 50kg encima de cada uno rumbo a Cacciola a tomar el Cacciomovil (o catamarán, entre nosotros). Allí nos aguardaban el Dr. Leito, El Toni (tambien denominado “el beeebe”), Mati, Martín (o “San La Muerte”) Y el Guni.
Los motores aceleraron, el catamarán avanzaba y atrás quedaba la tierra firme, atrás quedaban las obligaciones, e
l trabajo, la facultad… 3 días inolvidables nos aguardaban, pacientes, en la isla. Un viaje muy tranquilo, a pura turbina jajajaja.Una chimenea, un faro y un pequeño muelle se comenzaron a divisar ¡¡¡ TIERRA A LA VISTA!!!
Luego de un violento amarre (para mí que el capitán tenia registro sacado en Zárate jaja) bajamos junto con los 500kg de equipaje, compuestos por comida, ropa y sobre
todo mucho alcohol… y algunos drogas. Un viejo tractor, que pedía a gritos su jubilación, llevó nuestras pertenencias hasta el camping (menos las de Ema, que se quiso hacer el “yo señor camping me las banco todas” :P el único con las bolas bien puestas jeje).Luego de un rato de deliberar, y de hablar con la madama del camping (que le tenía ganas a Ema…) elegimos el lugar para echar las carpas.
¿Qué comemos? ¿Donde meo? ¿Con Quién duermo? ¿Soy Gay?, preguntas de ese calibre se escuchaban por doquier. El primer desafío se acercaba: Cocinar. Rápidamente, el Ingeniero Di Natale sacó de su mochila las barras de uranio y el reactor nuclear portátil (también conocido como anafe, cocina, hornalla, etc) y al grito de “MANDALE CENTRO ATÓMICO” cocinó unos soberbios capeletinis con salsa portuguesa, mientras algunos compraban cerveza, agua y algunos otros ejercían la práctica ilegal de la medicina: un arduo tratamiento.
Luego del banquete, sobrevino una interminable sobremesa en donde la cerveza pasaba de mano en mano cual plaga de dengue.Terminada la comilona, procedimos a la búsqueda y exploración del terreno aledaño y al reconocimiento de las carpas aledañas ;) Con troncos y vigas, improvisamos bancos y una precaria mesita (que luego se transformaría en una señora mesa!!)… Nuestro macabro plan de tomar la isla, cual Fidel Castro y Che Guevara ya estaba en marcha.La noche comenzó a caer, y la luz repentinamente desapareció; Era horade hacer fuego!!!
El estómago comenzaba a quejarse… el pueblo pedía comida. Al ritmo de “Welcome to Tijuana, Tequila Sexo Marihuana” el reactor nuclear entró
nuevamente en funcionamiento. Arroz con cebolla picada, salsa de tomate, mayonesa (para tapar el gusto a quemado del arroz… HIJOS DE PUTO!!) y papas a la leña eran el menú del día, digno de reyes.Junto con el Guni y …… emprendimos una larga caminanta nocturna por la isla, visitando lugares insospechados, tenebrosos y satánicos. Senderos minúsculos, en la mitad del bosque, con ruidos extraños y alimañas por doquier. Una imponente costa, las luces de colonia Uruguay, la casa de bombas, el cementerio, el crematorio, la plaza central, la laguna escondida fueron algunos de nuestros destinos aquella 1° noche en la isla de lost jajaja.El alba nos encontró durmiendo a algunos, y alucinando con flores violetas, personas que no estaban y
animales extraños a otros…El mediodía se acercaba, y los muchachos (y Cla) nos levantamos para empezar un nuevo día. Rumbeamos hacia la panadería, haciendo escalas antes en el baño (manga de sucios!!!), en el kiosko (manga de borrachos!!!) y en el puterío (manga de transexuales!! Jajaja). Después de un desayuno/almuerzo a las 3 de la tarde, decidimos armar una mesa como la gente, para la gran comida que nos esperaba al caer el sol… pollo a la leña con salsa!!!
Después de robar elementos abandonados, y de deforestar medio bosque de cañas, construimos una terrible mesa, que nos sería de mucha utilidad.
El día se había pasado muy rápido, y al que madruga Dios lo ayuda, pero como nosotros no madrugamos un carajo, no nos ayudo en nada… el sol se volvía a poner, y de nuevo había que ir a buscar madera y a cazar la cena. Como no había pollos sueltos, decidimos ir a comprarlos a la carnicería jajajaja en donde luego de 30’ de espera, de un viejo borracho y de $40 nos llevamos nuestro precioso tesoro: dos pollos listos para asar!!!
Lentamente, Ema y Maxi comenzaron a hacer el fuego, el cual al principio se hizo rogar bastante, pero luego prendió con mucha intensidad (si, casi prendemos fuego todo el bosque). Como buena gente que somos, les ofrecimos a los vecinos de carpa cocinarles su carne, ya que ellos no habían llevado parrilla. El intercambio era sencillo “carne por carne” jajajajaja pero ellos incumplieron su parte del contrato (CAGONES).Dos o tres horas más trde (mi noción del tiempo ya estaba afectada debido a los efectos del fernet) estuvo listo el pollo y cocinada la gallina!! Jajaja y la carne de los vecinos, quienes muy muy atemorizados vinieron a reclamar su parte. (CAGONES).En la mitad de la comida llegó el Guni, quien siempre traía (como los bebes) pan bajo el brazo… bueno cerveza bajo el brazo y no paraba de asombrarse de la capacidad de construcción y adaptación al ambiente que teníamos!! (Grande Guni!!!).
Como era de esperarse, el pollo se acabó tal como
se extinguieron los dinosaurios con el big bang. La 2° noche de caminata y aventura comenzaba… pero ésta vez, sin nuestro guía local “el islero”. Nuevos acampantes se integraban al grupo, Marvin, Pepe, y los otros que ni puta idea como se llamaban jajajajaEmprendimos camino hacia el aeropuerto, unas 4 o 5 cuadras a puro cántico, descontrol y delirios místicos. La inmensidad de la pista de aterrizaje nos invadió. Por un momento quedamos todos paralizados por lo que estábamos apreciando. Pero fiel a nuestras costumbres, y sin importarnos nada, nos metimos en la pista y en la mitad de la mencionada establecimos campamento en forma de ronda redonda; rogando a Dios,
Ala, Buda y demases que no hubiera vuelos nocturnos, porque sino cagabamos la fruta… la fruta, la verdura, la comida, la coca cola… todo!! Jajaja
Al ritmo de “How I wish you were here” y otras hermosas canciones comenzamos a relajarnos y a observar las estrellas, cada uno recostado por su lado y concentrado en sus propios pensamientos. Algunos se quedaron allí un rato largo, meditando y cantando, mientras otros nos fuimos a la playa a observar el contorno y las luces de la capital federal, quizá para no extrañar tanto a nuestros seres queridos.
Reunido el grupo en su totalidad, nuevamente comenzamos a caminar… esta vez para internarnos en medio de la selva, donde una aventura increíble nos esperaba.
Nada parecía fuera de lo normal, todo estaba calmo… el sendero nos guiaba y las luces de las linternas iluminaban el irregular suelo. De repente comenzamos a escuchar ruidos extraños, muy extraños…
Maxi aseguró haber visto gente al lado suyo que no existía, las linternas comenzaron a fallar, la temperatura a bajar y subir constantemente y la gente a asustarse. El camino se dividía, no sabíamos donde estábamos, como salir de allí ni hacia donde iban esos senderos. De pronto un claro se abrió, divisamos un monumento “a las dos naciones” muy extraño. Decidimos frenar ahí, poner un poco de música y relajarnos un rato. La música nos calmó… nos durmió, los 11 nos quedamos profundamente dormidos por una hora aproximadamente, y cuando nos levantamos teníamos el culo roto (bueno, eso no :P jajajaja). Ya faltaba poco para el alba, y debíamos descansar para poder al día siguiente emprender la retirada. Como pudimos, seguimos caminando por los senderos, todavía atemorizados por lo que había pasado y con la incertidumbre de a donde llegaríamos con ese camino.
Finalmente y luego de un buen rato, llegamos a la civilización!!! Estábamos a salvo.
Era ya, hora de dormir y de prepararse para el regreso. Los gallos no paraban de cantar, asi que recurrimos a medidas drásticas… los hicimos cagar fuego!! Jajajaja mentira, pero hubiera estado bueno, ¿o no?.
Las 12 del mediodía marcaba el reloj cuando decidimos comenzar el día. Un corto y agitado día ya que debíamos almorzar y juntar todo, antes de las 17hs que partía el catamarán.
Nuevamente éramos desafiados por el más allá… había que cocinar!! Pero ésta vez, un cocinero distinto, que sobresalía por el resto de los demás… el Beeebe tomó las riendas del almuerzo y preparó un exquisito arroz con salsa jardinera. Panza llena, corazón contento (y drogado)… todo listo para desarmar el campamento gitano “paja larran”.
Un arduo trabajo había comenzado… había que desarmar todo, las carpas, la cocina, la mesa, los bancos… había que empezar a pensar en el llegar a casa, en que al dia siguiente había que ir a trabajar, en que (8) todo concluye al fin, no es eterna la isla (8). Quejos, rezongues, suspiros y toda clase de interjecciones depresivas se oian… pero nuevamente al ritmo de “WELCOME TO TIJUANA, TEQUILA SEXO MARIHUANA” todo revivió. Las sonrisas comenzaron a surgir, y, con el tiempo justo guardamos todo.
17.00 marcaba el reloj cuando arribamos al muelle, luego de una interminable caminata… previa escala en el kiosco a “cargar combustible” (eh loco, vamo a comprar unas birras).
Un viaje de vuelta a todo vapor, meta birra y tratamiento. Guitarra, charango y bombo carnavalito para gozar…
La noche caía y nos encontraba arriba del barco, con frío y ganas de llegar a casa… 3 dias sin cagar, por dios!!!!
Luces se divisaban, una voz del mas alla decía “todos los pasajeros que se encuentren en la cubierta, deben ingresar para el arribo” , momentos después un hombre bastante negro y fornido salió del puente de mando (me costó 3 huevos y medio acordarme esas 3 putas palabras!!) con una macana, y al grito de “VIVA PERON CARAJO” nos hizo entrar a todos.
Luego de un suave atracamiento, los viajantes procedimos a descender… uno a uno nos despedimos, y comenzó la procesión hasta la estación de tigre, en donde el tren nos aguardaba impaciente para devolvernos a cada uno, sanos y salvos a nuestros respectivos hogares.
Un espectacular viaje, con mucha buena onda, mucho humor y por sobre todas las cosas, muy buena gente!!!
Disculpen los horrores de ortografía (si los hay) y de redacción, pero cuando uno es analfabeto, no hay por donde darle… aunque como dice Ema, “Siempre hay por donde Andy”.
Espero haberlos hecho reir un rato, y haber contado sin demasiada distorsión esta travesía de 10 amigos con mucha buena onda y ganas de divertirse…
(aunque faltaron cosas como "san la muerte" "cagame en el pechito" y demas :P)
NO MÁS PALABRAS SEÑOR JUEZ.
Andy, el que tira chistes por lo bajo…
Para el final algunos videos que dejo este viajecito.
1 - Ultimas horas en el Camping
2 - Una pequeña zapada que se armò sobre el Bote de Cacciola a la vuelta de isla, violas, armonicas y demas instrumentos en accion en una hermosa noche de otoño. Lamentablemente no habia luna asi que tampoco teniamos luz.
Al ritmo de “How I wish you were here” y otras hermosas canciones comenzamos a relajarnos y a observar las estrellas, cada uno recostado por su lado y concentrado en sus propios pensamientos. Algunos se quedaron allí un rato largo, meditando y cantando, mientras otros nos fuimos a la playa a observar el contorno y las luces de la capital federal, quizá para no extrañar tanto a nuestros seres queridos.
Reunido el grupo en su totalidad, nuevamente comenzamos a caminar… esta vez para internarnos en medio de la selva, donde una aventura increíble nos esperaba.
Nada parecía fuera de lo normal, todo estaba calmo… el sendero nos guiaba y las luces de las linternas iluminaban el irregular suelo. De repente comenzamos a escuchar ruidos extraños, muy extraños…
Maxi aseguró haber visto gente al lado suyo que no existía, las linternas comenzaron a fallar, la temperatura a bajar y subir constantemente y la gente a asustarse. El camino se dividía, no sabíamos donde estábamos, como salir de allí ni hacia donde iban esos senderos. De pronto un claro se abrió, divisamos un monumento “a las dos naciones” muy extraño. Decidimos frenar ahí, poner un poco de música y relajarnos un rato. La música nos calmó… nos durmió, los 11 nos quedamos profundamente dormidos por una hora aproximadamente, y cuando nos levantamos teníamos el culo roto (bueno, eso no :P jajajaja). Ya faltaba poco para el alba, y debíamos descansar para poder al día siguiente emprender la retirada. Como pudimos, seguimos caminando por los senderos, todavía atemorizados por lo que había pasado y con la incertidumbre de a donde llegaríamos con ese camino.Finalmente y luego de un buen rato, llegamos a la civilización!!! Estábamos a salvo.
Era ya, hora de dormir y de prepararse para el regreso. Los gallos no paraban de cantar, asi que recurrimos a medidas drásticas… los hicimos cagar fuego!! Jajajaja mentira, pero hubiera estado bueno, ¿o no?.
Las 12 del mediodía marcaba el reloj cuando decidimos comenzar el día. Un corto y agitado día ya que debíamos almorzar y juntar todo, antes de las 17hs que partía el catamarán.Nuevamente éramos desafiados por el más allá… había que cocinar!! Pero ésta vez, un cocinero distinto, que sobresalía por el resto de los demás… el Beeebe tomó las riendas del almuerzo y preparó un exquisito arroz con salsa jardinera. Panza llena, corazón contento (y drogado)… todo listo para desarmar el campamento gitano “paja larran”.
Un arduo trabajo había comenzado… había que desarmar todo, las carpas, la cocina, la mesa, los bancos… había que empezar a pensar en el llegar a casa, en que al dia siguiente había que ir a trabajar, en que (8) todo concluye al fin, no es eterna la isla (8). Quejos, rezongues, suspiros y toda clase de interjecciones depresivas se oian… pero nuevamente al ritmo de “WELCOME TO TIJUANA, TEQUILA SEXO MARIHUANA” todo revivió. Las sonrisas comenzaron a surgir, y, con el tiempo justo guardamos todo.
17.00 marcaba el reloj cuando arribamos al muelle, luego de una interminable caminata… previa escala en el kiosco a “cargar combustible” (eh loco, vamo a comprar unas birras).
Un viaje de vuelta a todo vapor, meta birra y tratamiento. Guitarra, charango y bombo carnavalito para gozar…
La noche caía y nos encontraba arriba del barco, con frío y ganas de llegar a casa… 3 dias sin cagar, por dios!!!!Luces se divisaban, una voz del mas alla decía “todos los pasajeros que se encuentren en la cubierta, deben ingresar para el arribo” , momentos después un hombre bastante negro y fornido salió del puente de mando (me costó 3 huevos y medio acordarme esas 3 putas palabras!!) con una macana, y al grito de “VIVA PERON CARAJO” nos hizo entrar a todos.
Luego de un suave atracamiento, los viajantes procedimos a descender… uno a uno nos despedimos, y comenzó la procesión hasta la estación de tigre, en donde el tren nos aguardaba impaciente para devolvernos a cada uno, sanos y salvos a nuestros respectivos hogares.
Un espectacular viaje, con mucha buena onda, mucho humor y por sobre todas las cosas, muy buena gente!!!
Disculpen los horrores de ortografía (si los hay) y de redacción, pero cuando uno es analfabeto, no hay por donde darle… aunque como dice Ema, “Siempre hay por donde Andy”.
Espero haberlos hecho reir un rato, y haber contado sin demasiada distorsión esta travesía de 10 amigos con mucha buena onda y ganas de divertirse…
(aunque faltaron cosas como "san la muerte" "cagame en el pechito" y demas :P)
NO MÁS PALABRAS SEÑOR JUEZ.
Andy, el que tira chistes por lo bajo…
Para el final algunos videos que dejo este viajecito.
1 - Ultimas horas en el Camping
2 - Una pequeña zapada que se armò sobre el Bote de Cacciola a la vuelta de isla, violas, armonicas y demas instrumentos en accion en una hermosa noche de otoño. Lamentablemente no habia luna asi que tampoco teniamos luz.
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